La seguridad industrial se refiere a un conjunto de prácticas destinada a prevenir accidentes o situaciones de riesgo tanto en el personal que labora dentro de las instalaciones, así como de los bienes de la empresa y el medio ambiente.
Trabajar en superficies inseguras, hacer determinados trabajos en ambientes hostiles, manipular de forma incorrecta los equipos, exponerse a ruidos, radiaciones o vibraciones, temperaturas extremas, humedad, entrar en contacto con sustancias químicas potencialmente peligrosas, son algunos de los riesgos a los que pueden exponerse los colaboradores en su lugar de trabajo.
Más allá del cumplimiento normativo, si quieres conocer la importancia de implementar las buenas prácticas en materia de seguridad industrial, te invito a leer el siguiente artículo.
Importancia de fomentar buenas prácticas en seguridad industrial
Promover las buenas prácticas en seguridad industrial es un asunto prioritario. De esta manera, se crea un espacio seguro para los colaboradores. A continuación, te explico por qué es importante fomentar buenas prácticas en seguridad industrial.
En primer lugar, los colaboradores pueden llevar a cabo sus actividades sin riesgos al contar con un sistema de seguridad adaptado al tipo de trabajo que realizan.
Al disminuir los accidentes o lesiones, las empresas ahorran dinero en pagos por indemnizaciones o gastos por reposición de equipos.
La productividad aumenta al reducirse los imprevistos o accidentes. Al cuidar la integridad de los trabajadores, las bajas por enfermedad o accidentes disminuyen, y, por ende, la rotación del personal.
Por último, la imagen corporativa también mejora cuando se presta atención a la seguridad del equipo de colaboradores. Tanto inversores como clientes ven de manera positiva a la empresa porque observan que sus miembros laboran en un ambiente seguro.
10 buenas prácticas en seguridad industrial
Toma nota de las mejores buenas prácticas en seguridad industrial que deberías implementar ya en tu empresa:
- Capacitar constantemente a los trabajadores en materia de riesgos y seguridad industrial. En este sentido, es importante incluir en el presupuesto anual los recursos para el equipamiento de seguridad y la puesta en marcha de un plan de prevención de riesgos y accidentes en el área de trabajo.
- Evaluar e identificar cualquier actividad que implique peligro en los espacios de trabajo con el fin de reducirlos. La información oportuna a los colaboradores sobre cuáles son las prácticas de riesgos en cada puesto de trabajo y qué acciones tomar para evitar accidentes son cruciales.
- Proveer a los trabajadores los equipos de protección personal como calzado, cascos, guantes, gafas, tapones antiruidos, entre otros.
- Aplicar normas estrictas en cuanto al almacenaje, manejo y desecho de productos químicos que expongan a riesgos al personal de la empresa. Es importante que cada colaborador cuente con información sobre el peligro que implica entrar en contacto con este tipo de sustancias.
- Distribuir los espacios de trabajo pensando en la ergonomía de los trabajadores. De esta manera, se evitarán lesiones asociadas al tipo de actividad que llevan a cabo.
- Realizar mantenimiento preventivo regular a la maquinaria de trabajo. Esto implica planificar e implementar actividades destinadas a la prevención de accidentes y riesgos en el espacio de trabajo.
- Señalizar los espacios que puedan representar algún riesgo a los trabajadores, tales como escaleras, materiales peligrosos o equipos. En estos casos se recomienda colocar barreras, avisos o cerraduras.
- Mantener señalizadas las principales vías de evacuación en caso de presentarse algún incidente. Los colaboradores deben estar al tanto de cuáles son las vías de escape durante una emergencia.
- Preparar un plan para aplicar en situaciones de emergencia. Lo ideal es que cada trabajador tenga claro cuáles son los pasos a seguir en caso de algún accidente o situación de peligro.
- Hacer seguimiento regular del cumplimiento de las normas de seguridad industrial. Para lograrlo, es esencial contar con los instrumentos de medición y control. No solo alertarán sobre cualquier evento que represente peligro, sino también permitirán llevar un control y la aplicación de medidas preventivas. Algunos de estos instrumentos son: los detectores de gas, los anemómetros, los decibelímetros, los calibradores de ruido, entre otros. Estos permiten identificar ruidos anormales, vibraciones, cambios en la temperatura, movimientos, escape de gases o posibles intoxicaciones por derrames de sustancias químicas.
Ahora que ya conoces la importancia y las buenas prácticas de seguridad industrial, te invito a implementarlas en tu empresa y contar con los instrumentos y equipos para promover la prevención.