Enterate en esta nota de qué manera se pueden prevenir los incidentes relacionados con gases en la industria minera.
Gases en entornos mineros
Las características de la minería hacen que la presencia de gases sea constante. Si bien algunos son detectables a través de los sentidos, en muchos casos son invisibles e inodoros, pero no por eso inocuos. Los gases pueden causar daños tanto a la salud de los trabajadores como a las máquinas, instrumentos e instalaciones.
Desde sus orígenes, la industria minera ha buscado maneras de detectar concentraciones peligrosas de gas. Una técnica antigua era cubrir a un minero con una manta húmeda y que avance sosteniendo una mecha con una llama en el extremo, identificando bolsas de gas.
Otra, que seguramente has oído alguna vez, era la de colocar un canario en la mina y vigilar su comportamiento: cualquier cambio era señal de que había gases nocivos en el aire.
Afortunadamente los métodos de detección evolucionaron y en la actualidad existen dispositivos rápidos y confiables.
Conocé los gases más comunes en la industria minera
Los gases que se detectan con mayor frecuencia en esta industria se categorizan en Ex (Representan peligro de explosión), Ox, (Relacionados con el desplazamiento o enriquecimiento de oxígeno) y Tox (Pueden ocasionar intoxicaciones).
Metano: Altamente volátil e inflamable, es tóxico para el sistema respiratorio humano. Ante su presencia se debe evacuar la zona de manera inmediata.
Monóxido y dióxido de carbono: Inodoros e incoloros, en pequeñas cantidades no simbolizan un problema. Pero cuando se presentan en concentraciones elevadas pueden causar intoxicaciones graves, e incluso la muerte.
Dióxido de azufre: Incoloro y de olor penetrante, puede ocasionar irritación en las vías respiratorias y contribuir al desarrollo de enfermedades pulmonares crónicas.
Dióxido de nitrógeno: De olor desagradable y color amarillento, tiene un nivel permisible de 1 ppm. Si se detectan mayores cantidades se debe evacuar y ventilar el área.
Óxidos de nitrógeno: Compuestos por gases tóxicos como el óxido nítrico y el dióxido de nitrógeno, puede adquirir una tonalidad marrón amarillenta en concentraciones elevadas. Ocasiona daños sistémicos en el cuerpo humano.
Sulfuro de hidrógeno: Conocido por su característico olor a huevos podridos, cuando supera los niveles permitidos (1 ppm) se debe retirar al equipo de trabajo y esperar a la ventilación del lugar.
Por último, el oxígeno. Aunque es necesario para la vida, también puede ser perjudicial cuando sale del rango de concentración saludable.
La prevención de riesgos, un factor clave
En la industria minera es crucial mantener los estándares de seguridad altos. Uno de los primeros pasos para esto es capacitar al personal de forma constante, para que conozca pormenorizadamente los riesgos relacionados con la presencia de gases.
La inclusión del total de los trabajadores en las formaciones eleva su compromiso con la seguridad y con la compañía. El resultado es el reforzamiento de la cultura de seguridad.
La medición de gases a través de equipos de detección certificados y calibrados debe realizarse de forma constante en las zonas críticas de la mina. Esto puede llevarse a cabo mediante estaciones de monitoreo fijas. También se pueden utilizar dispositivos portátiles
Otro punto imprescindible es la instalación de sistemas de ventilación eficientes para garantizar la circulación de aire fresco y la eliminación de gases perjudiciales de las áreas de trabajo. En zonas de mayor concentración gaseosa se deben emplazar puntos de ventilación localizada.
Prácticas que hacen la diferencia
A través de los años y las experiencias se han determinado formas de pensar y hacer en la industria minera que generan una sinergia en favor de la seguridad. Tal como contamos anteriormente, una acción coordinada de todo el equipo de trabajo es sin dudas la diferencia entre un entorno protegido y uno en peligro.
- Evaluación de riesgos, para identificar posibles gases nocivos.
- Actualización de todos los miembros del equipo acerca de los procedimientos de detección y los protocolos de emergencia.
- Mantenimiento y calibración regular en los equipos de detección de gases.
- Asegurar el cumplimiento de las normativas y regulaciones.
La industria minera ha sido clave en el desarrollo y uso de dispositivos para la detección de gas.
Los instrumentos de medición y control han evolucionado, y en la actualidad existen diversos tipos, ofreciendo respuestas a las necesidades de cada compañía, pero con un patrón compartido: una alta sensibilidad, precisión y confiabilidad.
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